Introducción:

La inteligencia artificial generativa ha emergido recientemente como una tecnología transformadora con el potencial de cambiar fundamentalmente cómo los humanos trabajamos, aprendemos y creamos.

Tres estudios recientes arrojan nueva luz sobre un tema clave relacionado con la IA: su capacidad para nivelar el campo de juego entre humanos con diferentes niveles de habilidad.

Por un lado, esto podría amenazar los trabajos y medios de vida de muchos; por otro, podría brindar nuevas oportunidades a aquellos históricamente en desventaja.

En este artículo, exploramos las implicaciones de estos hallazgos.

La IA como ecualizadora en tareas legales

El Estudio 1 evaluó el impacto de la IA en el razonamiento legal de estudiantes de derecho. Encontró que el acceso a GPT-4 mejoró el desempeño en preguntas sencillas de opción múltiple, pero no en preguntas complejas de ensayo.

Los estudiantes con peor desempeño basal se beneficiaron más. Con instrucciones adecuadas, la IA superó la capacidad humana en tareas legales básicas.

La IA como potenciador de la creatividad

El Estudio 2 examinó cómo la IA generativa afecta la creatividad en la escritura de historias cortas. Se encontró que el acceso a ideas de IA aumentó las evaluaciones de creatividad en términos de novedad y utilidad. El beneficio fue mayor para participantes inicialmente menos creativos. Pero las historias se volvieron más homogéneas.

La IA como compresor de la productividad

El Estudio 3 midió el impacto de ChatGPT en la productividad de profesionales en tareas de escritura.

ChatGPT aumentó la productividad al reducir tiempo y mejorar calidad, especialmente de trabajadores menos hábiles.

Esto sugiere un posible desplazamiento de trabajadores.

Oportunidades y amenazas:

La capacidad, mostrada por la IA para mejorar el rendimiento de personas menos talentosas innatamente, podría tener implicaciones de gran alcance. Por un lado, amenaza trabajos que antes requerían habilidades escasas, al automatizar esas habilidades. Por otro, permite que más personas contribuyan y encuentren valor. El camino a seguir probablemente yacerá en encontrar la manera óptima de colaboración humano-IA.

Conclusión:

Los recientes avances en IA generativa plantean preguntas fundamentales sobre la relación futura entre humanos y máquinas. Si bien existe la amenaza de disrupción masiva de empleos, también existe la promesa de ampliar el potencial humano.

Encontrar el equilibrio adecuado será clave. Pero una cosa es segura: la IA está aquí para cambiar las reglas del juego.